Técnicas de arboricultura
Otoño es una buena época para plantar en general; en clima cálido, incluso mejor que la primavera. Plantando a principios de otoño posibilitas que las lluvias de invierno se ocupen del riego y se establezcan para cuando llegue la primavera.
Si desea plantar unas pocas plantas truferas, una preparación clásica le bastará.
En el caso de realizar una plantación de
truferas, le sera necesario utilizar máquinas agrícolas. El trabajo de
suelo que tiene como objetivo favorecer el drenaje del suelo y con ello
el buen arraigo de las plantas. Un trabajo en profundidad es necesario
en todos los casos. Descompactar con un ripper en la linea de
plantación puede igualmente considerarse como complemento cuando el
terreno no ha sido labrado durante varios años.
Para poder optimizar el rendimiento, podemos corregir ciertos elementos químicos del suelo:
- pH de suelo: aporte de caliza
triturada, o de dolomita si el suelo tiene carencias de magnesio.
Encalar puede considerarse si el terreno es rico en materia orgánica ya
que la cal favorece la destrucción de esta.
Si C/N < 9 : aporte de materia orgánica rica en carbono (parte central del maíz por ejemplo).
Si C/N > 12 : aporte nitrato amónico de urea sin enterrar la materia orgánica.
Si C/N > 12 : aporte nitrato amónico de urea sin enterrar la materia orgánica.
Atención ! En todos los casos, no añada mantillo o turba a su suelo.
Lo que haría es acidificarlo, lo que pondría en peligro el mycelium.
Lo que haría es acidificarlo, lo que pondría en peligro el mycelium.
Plantación de plantas truferas
Las plantas son condicionadas en macetas de plástico.
Consérvelas en vertical, de preferencia al exterior, contra un muro o un seto. Humedezca de nuevo los cepellones de vez en cuando si necesario.
En el momento de la plantación, para facilitar trasplante de sus vegetales, humedezca o ponga en remojo los cepellones.
Haga unos agujeros cúbicos de 25 a 30 cm.
Consérvelas en vertical, de preferencia al exterior, contra un muro o un seto. Humedezca de nuevo los cepellones de vez en cuando si necesario.
En el momento de la plantación, para facilitar trasplante de sus vegetales, humedezca o ponga en remojo los cepellones.
Haga unos agujeros cúbicos de 25 a 30 cm.
Desembale el cepellón en el ultimo momento:
- Apriete el conjunto de la maceta y el cepellón con las manos para que el substrato no se desuna del sistema racinario.
- Abra la maceta desagrapandola de arriba hacia abajo para liberar el cepellón.
- Abra la maceta desagrapandola de arriba hacia abajo para liberar el cepellón.
Coja el cepellón con cuidado y posicione lo en el fondo del agujero
Recubra de tierra la totalidad del cepellón
para evitar que este se deseque en la superficie. Sobre todo no apisone,
así favorecerá el desarrollo de las raíces de su planta, Es mejor
construir una pequeña loma para evitar la acumulación de aguas de lluvia
en el pie de la planta, lo que podría asfixiar la raíces. Riegue
copiosamente ( de 3 a 4 litros de agua por planta ).
Una palizada podrá colocarse para evitar la
proliferación de las malas hierbas. Evite las empalizadas que se hayan
tratado previamente con un antifungico.
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